Niki Snow y su familia se durmieron juntos en la cama, ¡de la emoción que les daba la Navidad! Al amanecer, Niki y su padrastro estaban listos para el desayuno y los regalos, pero mamá se portaba como una gruñona y solo quería dormir. Eso no les impidió abrir los regalos. Había un regalo que Niki quería, envuelto en los bóxers de su padrastro. Le desató la enorme polla y se la chupó con delicadeza. Él se la folló en el sofá, junto a la mamá dormida, y le dio un poco de proteína extra en su ponche de huevo.
