El hijo de Reagan Foxx está siendo intimidado por Apollo, y Reagan no lo tolera. Se enfrenta a Apollo e intenta convencerlo de que deje de intimidar a su hijo, pero Apollo no lo acepta. Simplemente se niega a dejar de intimidarlo. Es entonces cuando a Reagan se le ocurre la brillante idea de chuparle la polla a Apollo para que deje en paz a su hijo, pero Apollo quiere más que una mamada. Reagan entonces hace lo que tiene que hacer y monta la polla de Apollo para que deje de intimidar a su hijo.
