Richelle Ryan ha vuelto a la caza del sexo y parece que solo los chicos más jóvenes quieren salir con ella. A ella le parece bien. Así que, cuando uno de sus amantes le pide fotos sexys, empieza a tomar algunas con gusto. Es entonces cuando Rion, el amigo de su hijo, entra por la puerta y ve qué está tramando. Se cree un experto en fotos sexys, así que se ofrece a ayudarla. Empieza a tomar fotos y Richelle se pone cachonda, tanto que hace que Rion se la folle ahí mismo.
