Las amas de casa aburridas y solitarias acaban convirtiendo sus fantasías en encuentros con Karl. Gia no es la excepción. Quiere ser poseída y dominada por un hombre fuerte. Necesita tanto mi polla y mi amor duro que incluso horneando galletas se le moja la galleta y pide a gritos que la glasee. Siempre estoy lista y dispuesta a enseñarte los fundamentos del entrenamiento para esposas.
No hay resultados disponibles
No hay resultados disponibles